Por: Salomé Campuzano.
Estudiante de Comunicación y Periodismo.
Universidad la Gran Colombia. - Armenia.
Se dice que la pandemia generada por el Covid-19 o Coronavirus ha sido el acontecimiento histórico de mayor trascendencia desde la segunda guerra mundial, este virus ha afectado a casi todos los países del mundo generando pánico y consecuencias no solo en la salud de las personas, también en el ámbito social y económico. En el caso específico colombiano, se adoptaron rápidamente medidas para la contención de este virus como fue el cierre de fronteras terrestres y marítimas y posteriormente la prohibición de vuelos internacionales, pese a estas decisiones del gobierno, el virus llego al país y comenzó a propagarse a una gran velocidad, lo que llevo al Estado a tomar medidas mucho más rigurosas como lo fue el aislamiento obligatorio entre otras, efectivamente este tipo de medidas son efectivas en cuanto a la mitigación del virus y el aplanamiento de la curva de contagios, pero estas solo son benéficas en este sentido, ya que para el ámbito social y económico podría generar daños que pueden llegar a ser irreversibles.
En primer lugar, el aislamiento obligatorio, esta medida fue tomada dentro del marco de Estado de emergencia declarado por el gobierno, es decir, al ser una decisión que fue tomada tan rápidamente, no hubo tiempo para pensar en las consecuencias que podría generar a futuro y que ahora se están viviendo. Lo que se busca con esto es evitar las aglomeraciones y el contacto social con el fin de que el virus no se esparza tan rápidamente, algunas ciudades han optado por medidas adicionales como lo es el pico y cedula para que las personas no se junten a la hora de abastecerse y así controlar la cantidad de población que sale a las calles. Obviamente todas estas medidas cuentan con excepciones como lo son los domiciliarios, los encargados de la seguridad de los conjuntos residenciales, el personal de la salud, entre otros. Hasta aquí todo bien, lo que se quiere lograr con la medida es positivo y entre más dure, más son las posibilidades de que los contagios se mantengan en bajas cifras , pero el problema reside en que gran parte del producto interno bruto colombiano viene de la economía informal, esta ha estado congelada desde que se expidió este decreto y en la mayoría de los casos, las personas que viven de esta economía son de bajos recursos y si no pueden dedicarse a esta no van a tener como alimentar a sus familias y poder vivir la cuarentena de una manera digna.
Lo anterior evidencia que el gobierno se encuentra en una gran encrucijada, para mantener la salud del país y evitar que se aumente la velocidad de propagación del virus debe mantener la cuarentena, pero de igual manera el hecho de congelar algunos sectores de la economía generaría consecuencias mucho peores que la propagación del virus, con estos sectores de la economía no solo me refiero a los comerciantes informales, también hago referencia a los pequeños y medianos empresarios los cuales si no producen y no venden no ganan dinero, y aunque sus locales permanezcan cerrados aún tienen que pagar las deudas que tiene con los bancos y la nómina de sus empleados, pese a que los bancos han brindado oportunidades de alivio, estas se tornan insuficientes frente a la situación actual, si el gobierno no modifica el estado actual de la cuarentena y abre poco a poco algunos sectores de la economía, va a llegar el momento donde los empleadores no van a tener con que pagarle a sus trabajadores y estos no van a poder tener su sustento para llevar a sus familia, en la balanza se encuentran la salud frente a la economía, es lógico que l gobierno no debe darle importancia solo a una y desproteger a la otra ya que eso generaría de cualquier forma unas graves consecuencias para la población y sobre todo para las clases más necesitadas, lo que se debe hacer en este momento es generar un equilibrio, es inevitable que la economía se vea afectada, pero eso no significa que no se pueda mantenerla a flote generando por lo menos lo estrictamente necesario para que estos sectores económicos puedan subsistir mientras se supera esta etapa de pandemia y el país vuelve a la normalidad.
Por otra parte, el país no pasa solo por problemas económicos debido a las medidas tomadas, también presenta una crisis de derechos humanos, el ejemplo más claro es el decreto 546 del 14 abril de 2020, lo que se busca mediante este decreto es sustituir las penas y medidas de aseguramiento privativas de la libertad dentro de los establecimientos carcelarios, por la prisión y detención domiciliaria durante un periodo de 6 meses y solo para la población que está en un alto grado de riesgo frente al contagio por el virus, en principio lo que se busca mediante esta medida es bueno, ya que garantiza los derechos de los internos que tienen alguna condición especial, el problema radica en las excepciones del decreto, es decir, aquellos que pese a tener una condición especial de alto riesgo, no pueden ser beneficiarios de este decreto debido a que están condenados o fueron imputados por un tipo penal especifico, el problema no sería tan grave si fuera una lista mesurada, pero la lista incluye casi todos los tipos del código penal por lo que los internos que se verán beneficiados por este decreto serán mínimos, lo cual no será tan significativo a la hora de evitar la propagación del virus y proteger las vidas de los más vulnerables a la hora de contagiarse.
Las dos medidas mencionadas anteriormente son una muestra de que, aunque se beneficien algunos sectores con estas, las consecuencias que generan en otros son inmensas, por lo que el gobierno nacional está en la obligación de generar un equilibrio donde se vean vulnerados en la menor medida posible los derechos fundamentales de todos los habitantes del territorio colombiano.
Estudiante de Comunicación y Periodismo.
Universidad la Gran Colombia. - Armenia.
Se dice que la pandemia generada por el Covid-19 o Coronavirus ha sido el acontecimiento histórico de mayor trascendencia desde la segunda guerra mundial, este virus ha afectado a casi todos los países del mundo generando pánico y consecuencias no solo en la salud de las personas, también en el ámbito social y económico. En el caso específico colombiano, se adoptaron rápidamente medidas para la contención de este virus como fue el cierre de fronteras terrestres y marítimas y posteriormente la prohibición de vuelos internacionales, pese a estas decisiones del gobierno, el virus llego al país y comenzó a propagarse a una gran velocidad, lo que llevo al Estado a tomar medidas mucho más rigurosas como lo fue el aislamiento obligatorio entre otras, efectivamente este tipo de medidas son efectivas en cuanto a la mitigación del virus y el aplanamiento de la curva de contagios, pero estas solo son benéficas en este sentido, ya que para el ámbito social y económico podría generar daños que pueden llegar a ser irreversibles.
En primer lugar, el aislamiento obligatorio, esta medida fue tomada dentro del marco de Estado de emergencia declarado por el gobierno, es decir, al ser una decisión que fue tomada tan rápidamente, no hubo tiempo para pensar en las consecuencias que podría generar a futuro y que ahora se están viviendo. Lo que se busca con esto es evitar las aglomeraciones y el contacto social con el fin de que el virus no se esparza tan rápidamente, algunas ciudades han optado por medidas adicionales como lo es el pico y cedula para que las personas no se junten a la hora de abastecerse y así controlar la cantidad de población que sale a las calles. Obviamente todas estas medidas cuentan con excepciones como lo son los domiciliarios, los encargados de la seguridad de los conjuntos residenciales, el personal de la salud, entre otros. Hasta aquí todo bien, lo que se quiere lograr con la medida es positivo y entre más dure, más son las posibilidades de que los contagios se mantengan en bajas cifras , pero el problema reside en que gran parte del producto interno bruto colombiano viene de la economía informal, esta ha estado congelada desde que se expidió este decreto y en la mayoría de los casos, las personas que viven de esta economía son de bajos recursos y si no pueden dedicarse a esta no van a tener como alimentar a sus familias y poder vivir la cuarentena de una manera digna.
Lo anterior evidencia que el gobierno se encuentra en una gran encrucijada, para mantener la salud del país y evitar que se aumente la velocidad de propagación del virus debe mantener la cuarentena, pero de igual manera el hecho de congelar algunos sectores de la economía generaría consecuencias mucho peores que la propagación del virus, con estos sectores de la economía no solo me refiero a los comerciantes informales, también hago referencia a los pequeños y medianos empresarios los cuales si no producen y no venden no ganan dinero, y aunque sus locales permanezcan cerrados aún tienen que pagar las deudas que tiene con los bancos y la nómina de sus empleados, pese a que los bancos han brindado oportunidades de alivio, estas se tornan insuficientes frente a la situación actual, si el gobierno no modifica el estado actual de la cuarentena y abre poco a poco algunos sectores de la economía, va a llegar el momento donde los empleadores no van a tener con que pagarle a sus trabajadores y estos no van a poder tener su sustento para llevar a sus familia, en la balanza se encuentran la salud frente a la economía, es lógico que l gobierno no debe darle importancia solo a una y desproteger a la otra ya que eso generaría de cualquier forma unas graves consecuencias para la población y sobre todo para las clases más necesitadas, lo que se debe hacer en este momento es generar un equilibrio, es inevitable que la economía se vea afectada, pero eso no significa que no se pueda mantenerla a flote generando por lo menos lo estrictamente necesario para que estos sectores económicos puedan subsistir mientras se supera esta etapa de pandemia y el país vuelve a la normalidad.
Por otra parte, el país no pasa solo por problemas económicos debido a las medidas tomadas, también presenta una crisis de derechos humanos, el ejemplo más claro es el decreto 546 del 14 abril de 2020, lo que se busca mediante este decreto es sustituir las penas y medidas de aseguramiento privativas de la libertad dentro de los establecimientos carcelarios, por la prisión y detención domiciliaria durante un periodo de 6 meses y solo para la población que está en un alto grado de riesgo frente al contagio por el virus, en principio lo que se busca mediante esta medida es bueno, ya que garantiza los derechos de los internos que tienen alguna condición especial, el problema radica en las excepciones del decreto, es decir, aquellos que pese a tener una condición especial de alto riesgo, no pueden ser beneficiarios de este decreto debido a que están condenados o fueron imputados por un tipo penal especifico, el problema no sería tan grave si fuera una lista mesurada, pero la lista incluye casi todos los tipos del código penal por lo que los internos que se verán beneficiados por este decreto serán mínimos, lo cual no será tan significativo a la hora de evitar la propagación del virus y proteger las vidas de los más vulnerables a la hora de contagiarse.
Las dos medidas mencionadas anteriormente son una muestra de que, aunque se beneficien algunos sectores con estas, las consecuencias que generan en otros son inmensas, por lo que el gobierno nacional está en la obligación de generar un equilibrio donde se vean vulnerados en la menor medida posible los derechos fundamentales de todos los habitantes del territorio colombiano.
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